El Ros Casares avanza hacia los cuartos de final de la Euroliga, donde ya le espera el Bourges.

Victoria del Ros Casares ante el Euroleasing Sopron húngaro por 86-63 en el tercer y definitivo partido de los octavos de final de la Euroliga. De este modo las valencianas, dirigidas en este partido por última vez por Jordi Fernández, continúan vivas en la competición y se medirán en los cuartos de final al Bourges francés en una eliminatoria que dará comienzo el próximo 22 de febrero.

Katie Douglas fue la jugadora más destacada en el ataque del conjunto valenciano al irse hasta los veinticinco puntos en el último encuentro, si bien en el cómputo global de la serie Cindy Lima fue la más regular durante los tres partidos.

Sopron comienza asustando.

Salió el conjunto húngaro muy enchufado a la cancha, a sabiendas de que sus pocas opciones de llevarse la eliminatoria pasaban por tratar de repetir un partido como el disputado el viernes anterior. Las primeras ventajas, aunque no muy elevadas, fueron para el equipo visitante (por delante en el marcador desde el 4-8 hasta el 8-12). Despertó pronto el Ros Casares para igualar el marcador mediado el primer periodo, comenzando así un intercambio de canastas que mantuvo a los dos conjuntos con ligeras ventajas durante los primeros diez minutos, al final de los cuales se llegó con un marcador de 24-20. La primera mitad del segundo cuarto mantuvo las diferencias hasta el minuto quince (32-26), momento en el cual Sopron comenzó a venirse abajo.

El ritmo de Núria.

Buena culpa de ello la tuvo la entrada de Núria Martínez a la pista. Su presencia subió el nivel defensivo de las valencianas y el equipo comenzó por fin a correr, haciendo mucho daño a Sopron con varios contraataques consecutivos. Núria marcaba el ritmo desde atrás y sus compañeras Douglas y Reis (mucho más acertada que en el día de su debut) se encargaban del resto en ataque, acompañadas de una Marta Fernández que en esto de jugar transiciones rápidas es una auténtica especialista. Máxima ventaja de doce puntos para el Ros Casares al llegar al descanso, 43-31.

Esa distancia se mantuvo (54-44) en el tercer periodo, con el juego interior húngaro (especialmente Tamane, la mejor de su equipo) impidiendo que las valencianas se marcharan definitivamente en el luminoso. Pero nuevamente la entrada de Núria a la pista volvió a resultar definitiva. La catalana comenzó de nuevo a marcar a sus compañeras el ritmo que debía seguir el partido, una fuerte defensa, y un parcial de 12-4 en los siguientes cinco minutos, cosechado especialmente gracias a una acertadísima Douglas en el lanzamiento exterior, a la rapidez de Fernández y a la insistencia de la hiperactiva Cindy Lima (principalmente en el rebote ofensivo) prácticamente dejaba resuelto el encuentro y la eliminatoria (66-48, minuto 32). El último cuarto fue un puro trámite, donde el intercambio de canastas volvió a ser similar al visto en el primer cuarto del partido. Al final, 86-63 para las valencianas, con cuatro jugadoras con diez o más puntos y con todas las que salieron a la pista con al menos cinco, dando muestra de la importancia del grupo en esta crucial victoria.

Espera Bourges.

Con esta victoria el Ros Casares avanza hacia los cuartos de final de la Euroliga y se acerca hacia su objetivo de disputar una nueva Final Four. El rival en esta ocasión será el Bourges francés, en una eliminatoria que tendrá lugar el 22 de febrero en Valencia y el 25 del mismo mes en la localidad gala, volviendo a tierras españolas el 2 de marzo en caso de ser necesario un partido de desempate. Ambos conjuntos ya se vieron las caras esta temporada en la primera fase de la competición con una victoria para cada bando: 74-47 en la ida para las valencianas y 58-55 en la vuelta para las francesas.

Natalia Hejkova, nueva entrenadora.

El partido de ayer, además, supuso el punto y final a la etapa de Jordi Fernández en el banquillo valenciano. Fernández se va tras no haber cumplido ninguno de los objetivos del equipo hasta la fecha (copa y supercopa) y dejando tras de sí un mal juego de equipo y la sensación de haber desaprovechado gran parte del potencial de la plantilla que ha tenido entre manos. Su sustituta es Natalia Hejkova, una auténtica eminencia en el mundo del baloncesto femenino. No en vano, la preparadora eslovaca ha ganado hasta en cuatro ocasiones el título de la Euroliga: en 1999 y 2000 al frente del Ruzomberok y en 2007 y 2008 dirigiendo al Spartak de Moscú. Hejkova debutará este próximo sábado en Ibiza en el partido correspondiente a la decimoctava jornada de la liga femenina.